By 30 de Mayo de 2025

Cómo se cultivan las mejores pasas en el desierto más árido del mundo

Descubre el proceso detrás del cultivo de pasas chilenas en las condiciones más extremas
Agricultura en el desierto de Atacama

Cultivo de pasas en el desierto

Cultivar pasas en el desierto más árido del mundo puede parecer una contradicción. Sin embargo, en Chañaral, región de Atacama, agricultores visionarios han logrado transformar un paisaje inhóspito en un oasis productivo, donde nacen algunas de las pasas más valoradas del mundo. ¿Cómo es posible esto? A través de una combinación precisa de tradición, tecnología y aprovechamiento inteligente de los recursos naturales.

Todo comienza con la selección de terrenos ricos en minerales, pero bien drenados. El tipo de suelo es crucial para que la vid pueda desarrollar raíces fuertes y absorber los nutrientes necesarios. A diferencia de otras zonas agrícolas, en el norte de Chile no hay lluvias estacionales. Esto permite tener un control casi total del riego, lo cual es una ventaja clave en el cultivo de pasas.

El sistema de riego utilizado es por goteo, una técnica eficiente que reduce el desperdicio de agua y asegura que cada planta reciba la cantidad justa. Esta práctica, combinada con el uso de energía solar para alimentar los sistemas de bombeo, hace que el cultivo de pasas en esta región sea también un ejemplo de agricultura sustentable.

Durante la etapa de crecimiento, las vides requieren monitoreo constante. En Doña Patricia utilizamos sensores de humedad, estaciones meteorológicas y análisis de suelo para tomar decisiones precisas sobre fertilización y riego. Todo esto permite obtener uvas de excelente calibre, color uniforme y sabor concentrado.

Una vez alcanzado el punto óptimo de madurez, las uvas se cosechan a mano, preservando su integridad. Luego, se distribuyen cuidadosamente sobre camas especiales al aire libre, donde son secadas bajo el sol del desierto. Este proceso puede tomar entre 10 y 20 días, dependiendo de la variedad y las condiciones climáticas. No se usan hornos ni químicos: todo es 100% natural.

“La tierra y el sol hacen el trabajo. Nosotros solo cuidamos el proceso con respeto y paciencia” — Agricultor local de Doña Patricia

Finalmente, las pasas se limpian, clasifican y empacan en una planta cercana al campo, asegurando frescura y trazabilidad. Este método de producción ha posicionado a las pasas chilenas, especialmente las del desierto, como productos premium en mercados como Alemania, Estados Unidos y Japón.

El cultivo de pasas en el desierto es un ejemplo inspirador de cómo la innovación agrícola puede florecer en condiciones extremas. Es también una prueba del compromiso de Doña Patricia con la calidad, la sustentabilidad y el desarrollo local.